Uno de los vinos de frutas más aromáticos y sensuales que suele ser elaborado en países tropicales es el fabricado a partir del fruto de maracuyá, fruta de la pasión o parchita (Passiflora edulis). Por ser una fruta de alta acidez y aroma intenso, el maracuyá es capaz de mostrar un gran rendimiento en el momento de ser acondicionado para fermentación.
La génesis de este vino, a partir de una fruta con alto contenido de ácidos, lo hace presentarse de manera impetuosa pero a la vez armónica y sensual. Sus mejores cualidades afloran cuando no debe competir con platillos altamente condimentados.
A continuación compartimos la receta de vino de maracuyá incluida en el libro Haciendo Vino de Frutas en la Cocina.
15 maracuyás grandes
3Kg de azúcar refinada.
3/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio
1/2 cucharadita de levadura de panificación.
Agua suficiente para 15 litros.
Lienzo limpio de 1m x 1m.
Recipiente para fermentación marcado a 15 litros.
12 Botellas de 750ml con tapa.
Cortar los maracuyás en mitades, extraer la pulpa con una cuchara y colocarla en el recipiente de fermentación. Agregar el azúcar, el bicarbonato y agitar para disolver muy bien. Posteriormente adicionar la levadura activada. Dejar fermentar hasta que cese completamente la turbulencia y el desprendimiento de gas (5-7 días). Filtrar con lienzo. Permitir decantar y trasiegar repetidamente hasta obtener un vino claro. Embotellar y guardar en refrigeración. Volver a decantar si es preciso.
¡Salud!